"LEMON LOAF"

Bueno, lo primero que tengo que hacer es disculparme por todo este tiempo sin publicar nada pero es que últimamente están pasando muchas cosas, más malas que buenas, pero bueno... Habrá que seguir peleando mientras se pueda y celebrar las pocas cosas buenas que la vida nos trae. Gracias a los que dejáis comentarios: Me hacen sentir muy bien y me gusta un montón leeros. Gracias.
La otra cosa que os quiero decir es que lo sencillo de esta receta siempre me ha atrapado. Es cierto que me gusta todo lo que sabe a limón, sea lo que sea. Pero este tipo de cakes, son tan caseros y tan de siempre que me encantan. Es el típico pastel que te hacía tu abuela, o el que hacías en las vacaciones de verano cuando te ibas al campo, o una manera rápida de recibir unas visitas inesperadas. Siempre buscamos cosas nuevas, recetas originales de las que no haya miles de fotos en la red o cosas que sorprendan por su innovación o que tengan una técnica culinaria especial... Una vez escuché a alguien discutir con una japonesa. Alguien le estaba recriminando que eran una cultura muy tradicional y muy metódica. A la pregunta: ¿Porqué sois tan tradicionales?, la japonesa respondió rotundamente: Lo tradicional es lo que siempre funciona, por eso siempre se hace y siempre estará ahí. Si lo tradicional funciona, ¿para qué cambiarlo? Creo que es un punto de vista razonable. Este cake es muy sencillo y muy de siempre. Muy rico. Por eso siempre estará ahí y siempre nos encantará.

INGREDIENTES: 4 huevos, 300 gr de azúcar, la ralladura de un limón, 300 gr de harina, 2 cucharaditas de levadura en polvo, 250 ml de leche, 1 cucharada de esencia de limón o en su defecto el zumo de un limón, 200 gr de mantequilla.
ALMÍBAR: 100 ml de zumo de limón, 50 gr de azúcar.
GLASEADO: 125 gr de azúcar glass, unas cucharadas de agua al gusto.
Precalentad el horno a 160 grados (180 grados si no es de aire como el mío). Untad un molde rectangular con mantequilla y espolvoreadlo con harina. Batid la mantequilla blanda con el azúcar hasta conseguir una crema y luego añadid los huevos de uno en uno batiendo bien tras cada adición para que se integren en la masa. Añadid la esencia de limón o el zumo y la ralladura. Mezclad en un bol la harina con la levadura y añadidla intercalándola con la leche. Comenzad añadiendo los ingredientes secos y acabad con los secos. Removed bien hasta que todo esté bien mezclado y verted la mezcla en el molde y metedlo al horno durante unos 50 ó 60 minutos. Una vez que el palillo salga seco sacadlo del horno y dejadlo en el molde 15 minutos antes de desmoldarlo.
Para el almíbar poned el azúcar con el limón en un cazo y llevadlo a ebullición hasta que se reduzca a la mitad. Luego retiradlo del fuego y dejadlo enfriar.

Con una brocheta haced unos cuantos pinchazos en el cake mientras está aún caliente y verted el almíbar por encima. 
Mezclad el azúcar con una cucharada de agua y mezclad bien. Id añadiendo más agua en función de como queráis que os quede de espeso el glaseado. Vertedlo por encima del cake una vez que esté frío completamente y dejad que se cristalice el glaseado antes de disfrutarlo.

NOTA: Los moldes para este tipo de cakes compradlos siempre de aluminio clarito, como los de la marca PME. Si lo hacéis en uno de esos moldes que son negros por dentro el pastel quedará tan oscuro como el mío. El aluminio oscuro turra mucho más los cakes por eso os aconsejo que utilicéis siempre moldes de aluminio de color claro.